La Crucifixión

Uno de los ensayos más hermosos que conozco sobre un grabado es el que plantea José Joaquín Parra Bañón sobre la descripción que Saramago hace de un grabado atribuido a Durero, concretamente La Crucifixión. En él se describe cómo el premio Nobel tiene en presencia la imagen y se propone convertirla en palabras; o lo que es lo mismo, a través de las palabras intenta construir una imagen al lector tal y como el escrito le va dictando. Esta propuesta literaria corresponde al primer capitulo de su obra El Evangelio según Jesucristo. Es probable que Durero grabase esta estampa en Italia hacia 1500. (tomado de: blog realizado por María del Mar Bernal, profesora de grabado de la Facultad de Bellas Artes de la Universidad de Sevilla)